Somalia. Lo primero que nos ronda por la cabeza al escuchar este nombre son piratas. viles y despiadados ladrones que saquean impertérritos todo navío que pasa por sus aguas y amasan riquezas ingentes.
La piratería antaño, además de una filosofía de vida, era la industria por excelencia. Es decir, sin apenas inversiones los piratas se hacían con los bienes de otros. hoy día en somalia, uno de sus tesoros ,la gran abundancia de peces (que ayudaría a salir adelante a esta tierra desértica de escasos recursos )se ve esquilmada por pescadores extranjeros con armas de pesca y técnicas mucho mas modernos que los humildes cayucos con los que ellos pescan.
La piratería no existiría de no ser por nosotros. sí, tú y yo. Que no nos basta con comer pescado cuando abunda y nos comemos hasta los "pezqueñines" impidiendo que se mantengan las pesquerías. Y ante este problema acudimos a robar una de las únicas fuentes de comida a un país donde la esperanza máxima de vida ronda los 50 años y cada familia tiene unas seis bocas que alimentar. Un país caótico, sin autoridad y sumido en la guerra desde 1991, año que la unidad efectiva del Estado desapareció. Y que a pesar de las misiones de la ONU y de EE.UU se divide en clanes y grupos rivales que imponen su ley por medio de las armas.
Los piratas no son el problema, son la consecuencia del caos y la pobreza, en un país que cada vez depende más de ayudas humanitarias, que carece de agua potable, maestros y un sistema de salud medio decente.
Estos somalíes no tienen otro remedio que comportarse como siglos atrás , asaltando barcos y ya de paso, reclamar secuestros. Y a lo que se ve no parará ,puesto que es un negocio rentable, el único que funciona en un país destruido por las guerras: 75 millones de euros de beneficio en 2008 con 40 barcos secuestrados no es poco.
Pero aún así insisto; tengo mucho más pánico a los corsarios, en este caso nosotros, que con total libertad les arrebatamos cualquier bien que nos sea interesante con el respaldo de gobiernos ejércitos y tribunales .
Para más información pregunten al loro del capitán ,quizás les desvele el paradero de los peces del cantábrico.
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